Uno de los actores claves en el Programa Fruticultura Sustentable Región de Valparaíso es Bruno Devoto, propietario de la empresa Agrícola Rivarola, comuna de Limache, dedicada a los cítricos. Junto a otros agricultores forma parte de un programa piloto con Corfo y Telefónica I+D que consiste en el uso de sondas de riego en la operación del campo. “Estamos viendo cómo funciona, sus resultados, y una vez que estemos 100% se va a traspasar a otros para que conozcan estas nuevas tecnologías”, explicó.

¿Y cómo ha sido la experiencia hasta hoy?

“Bastante bien. Ha costado al principio acostumbrarse al nuevo sistema de riego, pero es una herramienta más que tenemos nosotros para determinar los volúmenes de agua, en particular el cuándo y cuánto regar. Es un elemento más que nos ayuda a tomar las decisiones de riego. Hay que seguir implementando lo que es calicata, extensómetro y a la vez complementarlo con estas sondas de riego.”

¿Han apreciado un menor consumo de agua?

“Como recién vamos a cumplir un primer año, aún no tenemos claros los volúmenes. Este año es de ensayo, en el cual vamos a determinar si podemos ahorrar un poco de agua de acuerdo con la información que me proporcionan las sondas de riego.

Sí me han permitido las sondas determinar cuándo y cuánta agua debo aplicar en las épocas de invierno, lo que antes no lo podíamos hacer. Ha sido una ayuda y un factor interesante para el tema de riego en la época de invierno.”

¿Son una buena herramienta entonces?

“Es una buena herramienta porque nos permite tener en tiempo real el análisis de suelo, su estructura, análisis de calicata, y de acuerdo con eso determinar parámetros y rangos en los cuales nos íbamos a mover en las distintas profundidades del suelo.

Todos estos elementos y trabajos que se han hecho nos han permitido definir márgenes, es decir la capacidad de campo de nuestro suelo y el punto de estrés, entonces nosotros debemos manejarnos dentro de esos parámetros para definir el cuándo regar y el tiempo de riego en nuestro suelo para que volvamos a la capacidad de campo.

Toda esta tecnología nos ha permitido conocer mejor nuestro suelo y tomar mejores decisiones en el riego, lo cual nos va a permitir ahorrar un poco de agua y deberíamos ver un aumento en la producción de limones.”